Otro pais europeo en plena crisis capitalista y al borde del rescate de sus aliados europeos ha pasado por las urnas. Los resultados, con un aplastante 53,3% de abstención, revelan la distancia que separa a la gente de a pie y sus intereses de lxs politicxs. Por más que maquillen los resultados el descontento es generalizado y se debe saber traducir en las calles, pasando por encima de los sindicatos que lo único que han planteado ha sido 1 día de huelga vacía en un oceáno de capitalismo.
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