Este escrito se propone repasar la situación de los últimos meses en el sector sanitario donde la amenaza de recortes se va convirtiendo en realidad mediante las políticas del Departament de Salut dirigido por el nuevo conseller Boi Ruiz. Además trata de ampliar lazos para actuar con otras personas que consideren que una postura activa es indispensable para contribuir a repeler las políticas de recortes que se quieren imponer con objetivos económicos y estratégicos.
Prolegómenos
Las reformas basadas en el mercado (o en los costes) se remontan por lo menos a los años 70. Los esfuerzos para limitar el gasto público incluyen el gasto sanitario. Organismos internacionales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional recomiendan e imponen diversas recetas para ello, especialmente en países en vías de desarrollo. El único principio para los neoliberales es que nada del gasto privado en atención médica, realizado por quienes pueden costearlo, sea utilizado para subsidiar los servicios de salud de quienes no pueden costearlo. Los pobres deben quedar confinados a su esfera exclusiva de servicios mínimos y presupuesto bajo, mientras los ricos ejercen sus opciones como consumidores. Con estos presupuestos de un tiempo a esta parte en algunos países y dependiendo de contextos internacionales se ha ido implantando este modelo. Las experiencias no han sido muy esperanzadoras para sus defensores. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha señalado datos alarmantes en este sentido en varios de los países que han tomado estas medidas (recortes presupuestarios notables, reducción de camas, cierre de hospitales rurales, falta de medicamentos y equipamientos o tarifación de los usuarios). En muchos casos los hospitales financiados con inversión privada han quebrado al paso de los años y han tenido que ser rescatados por el Estado de turno. Aún así, en el estado español este modelo se ha ido desarrollando, con las diferencias de tempo motivadas por las transferencias autonómicas. Si en Catalunya el modelo catalán lleva ya 15 años de desarrollo (que han servido para que haya más empresas dedicadas a proveer servicios de salud que a la venta de desodorantes) en la Comunidad de Madrid es desde la llegada de Esperanza Aguirre al poder que la política sanitaria se orienta descaradamente hacia esas recetas neoliberales, poniendo en pie de guerra a gran parte de los trabajadores del sector y a los usuarios. Valencia por su parte cuenta ya con la gestión privada de varias zonas a través de la empresa Ribera Salud. Es interesante leer el libro ‘¿Por nuestra salud? Sobre la privatización de los servicios sanitarios’ (se puede leer gratis en www.slideshare.com/amotinadxs/por-nuestra-salud) que detalla el contexto en el que nos encontramos actualmente.
La llegada del nuevo Govern Desde que hubo el cambio de Govern el Departament de Salut se ha encargado de alarmar a todo el mundo agitando el espantajo del déficit. El motivo de esta fanfarronería es el de dejarnos indefensos ante los próximos recortes, justificarlos de antemano, que no haya ninguna reacción ni por parte de los trabajadores ni de los usuarios. Han esparcido propuestas diferentes a través de sus distintos voceros. Todas ellas hacían referencia a degradar la atención pública. No puede ser de otra manera, viniendo de donde vienen muchos de los cargos del Departament. Desde recortar plantillas (como si no fueran cortas ya de antemano) mediante varias modalidades (ERES, no cubrir plazas de jubilaciones ni bajas ni reducciones de jornada) hasta retirar servicios que creó el mismo Departament tiempo atrás pasando por aumentar productividad recortando salarios o aumentando horas de trabajo o desgravar impuestos a las mutuas. Y es que les gusta llenarse la boca con el nivel europeo, pero luego no cumplen ni la mitad de lo que deberían (ni en salarios ni en personal contratado).
Los últimos dos meses han sido planteados como una ofensiva desde el Departament. Repasemos un poco la cronología de noticias publicadas en prensa:
· 24-1-11 CIU hará recortes de presupuesto en salud de hasta el 10%, es decir 900 millones de euros menos.
· 2-2-11 Boi plantea cierres de servicios de hospitales comarcales redirigiéndolos a servicios más alejados.
· 3-2-11 Se incluirá coste de los medicamentos en las recetas. Boi, al más puro estilo nazi, afirma que ‘no es solidario descuidar la salud’.
· 5-2-11 Salut afirma paralización de construcción hospitales de Tortosa y Girona. Boi Ruiz afirma que hay que aumentar productividad trabajando más horas. CCOO y SATSE critican las palabras de Boi, y trasladan el problema de la productividad a la mala gestión. Se prevé revisar investigación para adecuar a creación de patentes para conseguir retorno económico. Boi Insiste en mutualización para descongestionar sistema público. ICV critica esta postura porque las mutuas no descongestionan gasto farmacéutico ni intervenciones más complicadas.
· 14-2-11 Salud sopesa parar más hospitales nuevos (Rubí, Montcada, Vilanova y Viladecans) e inversiones previstas en otros hospitales. Las siguientes son los hospitales que podrían verse afectados por el recorte: Hospital Ernest Lluch de Montcada i Reixac, Hospital Vicente Ferrer de Rubí, Hospital del Garraf de Vilanova i la Geltrú, Hospital de Viladecans, Hospital de L'Hospitalet, Hospital Josep Trueta, Hospital Verge de la Cinta en Tortosa, Vall d'Hebron, ampliación del hospital de Bellvitge, Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona (Can Ruti), Hospital Joan XXIII de Tarragona, Hospital Arnau de Vilanova de Lleida, Hospital Sant Bernabé de Berga e Instituto Catalán de Oncologia.
· 18-2-11 Más de 2000 médicos firman contra los recortes sanitarios y por los recortes de burocracia y cargos intermedios. Acción autónoma con soporte de Metges de Catalunya (MC) que se ofrece como figura de negociación.
· 19-2-11 CCOO alerta de menos personal, menos inversión y más listas de espera.
· 25-2-11 CCOO alerta de infrafinanciación crónica del sistema sanitario catalán. Mientras el PIB por cápita es del 117% de la media de la UE-15 el gasto sanitario es del 79,7%.
· 2-3-11 Se alargarán las listas de espera de operaciones no urgentes para recortar gastos. ´
· 3-3-11 La patronal sanitaria no descarta expedientes de regulación. Boi afirma que los recortes se mantendrán más allá de la crisis porque obedecen a un cambio de estrategia.
· 10-3-11 Marina Geli defiende la gestión de su partido político afirmando que en 2003 el déficit duplicaba el actual
· 23-3-11 El Consejo Asesor para la Reactivación Económica y Social propone grabar algunos servicios sanitarios.
· 26-3-11 Hospital de Sant Pau cerrará 35 camas. Además se plantean medidas de reutilización de sábanas, material quirúrgico o recipientes urinarios e intentar desviar a ‘enfermos frágiles’ a centros sociosanitarios. Hospital de Granollers prevé externalizar a mutuas privadas servicios como el de Alergología infantil y destinar una de sus plantas a atender partos para la sanidad privada. Otras medidas en general pasan por el abaratamiento del menú (ya se sabe que en los hospitales se come de jujo…).
En resumen, Boi Ruiz, como cabeza visible de la estrategia neoliberal en el ámbito de la salud en Catalunya, acepta la reducción de presupuesto sin problema y gestiona lo que le dan. Lo hace sin cuestionárselo porque seguramente siempre ha creído conveniente la minimización de la sanidad pública y la complementación con la sanidad privada-concertada (sólo hay que leerse algunas entrevistas cuando era presidente de la patronal de hospitales concertados (UCH). De esta forma si no tienes medios económicos tienes derecho a una sanidad limitada y si los tienes te pagas una sanidad mejor.
Respuesta social y sindical en este tiempo Que las quejas son generalizadas es sabido por todo el sector, pero es necesario tomar partido activo. ¿Qué y cómo hacer?
Nos dicen que esto no es Grecia. Es cierto, pero las medidas gubernamentales (estatales y autonómicas) son las mismas o muy similares. El objetivo es el mismo y viene marcado desde los organismos internacionales. Apuestan por el libre comercio, por la mercantilización de todo (salud, saber, atención social). En Grecia, los médicos han mantenido duras huelgas por las medidas que están implantando. Igual que el resto de trabajadores. ¿Qué y cómo hacer cuando aprueben un decreto para aumentar el horario laboral u otra reducción de la masa salarial o despidos? ¿Dejaremos que sólo sean los sindicatos del gremio sanitario los que negocien cuanto está bien que nos jodan? ¿estamos dispuestos a ceder? ¿y en qué medida? Que hagan recortes ahora no significa que no continúen haciéndolos. Más bien alimenta la posibilidad de que los sigan haciendo si la respuesta es mínima. Lo que no hagamos nosotros no lo van a hacer los dirigentes sindicales (los dos sindicatos mayoritarios ya nos han mostrado su función meses atrás y el resto de sindicatos no tienen poder suficiente ni para traicionarnos) ni mucho menos la clase política o la empresarial, como es evidente.
Por el momento se respira un aire de insatisfacción generalizada, que si no se organiza de alguna forma lo único que generará será malestar personal y laboral (también la OCDE alerta sobre el empeoramiento de condiciones laborales cuando se aplican recetas de mercado al ámbito sanitario). Hasta ahora las respuestas se han limitado a la firma de un manifiesto por más de 2000 médicos hospitalarios entregadas en el Departament abogando por el mantenimiento de las plantillas, la limpieza del sistema sanitario de burócratas y la priorización de la atención del paciente y no la económica) y a las declaraciones de CCOO, UGT, MC y SATSE contra los ataques del nuevo conseller.
Conclusiones Nos toman por idiotas que nos lo tragamos todo si creen que un Govern copado por gente salida de ESADE, EADE y demás corporaciones formadoras de gestores no nos genera desconfianza. Su clara intención es la de repartir el pastel de lo todavía no completamente privatizado: la sanidad, la enseñanza, los servicios sociales, la universidad. Cualquiera que trabaje en uno de estos sectores ya se habrá dado cuenta de por dónde van los tiros. Degradar el sector público para desviarlo luego al privado (adopte la forma que adopte). La excusa del déficit no cuela. Pueden tomar otras muchas medidas para conseguir dinero, medidas que no afecten a los pilares básicos del Estado del Bienestar. Lo que pasa es que será más rentable para sus intereses de clase (aunque esto último suene antiguo a estas alturas de la historia).
Y es que algunos datos de nuestro estimado modelo catalán cantan que da gusto. El presupuesto destinado a Salut en Catalunya está por debajo del del resto del conjunto del Estado y aún más por debajo del destinado en el resto de países de la UE-15. En el Consell Executiu del Servei Català de la Salut participan en la toma de decisiones 3 miembros de la patronal hospitalaria catalana (representan a Unió Catalana d’Hospitals, Consorci de Salut i Social de Catalunya y Associació Catalana d’Entitats de Salut). ¿Por qué? ¿No es parte de la gestión pública?. Y en otros aspectos como la formación continuada o la gestión (asesorías, consultorías…) mejor ni entrar, porque lo privado es la norma y tiene sus repercusiones.
Con la separación entre compradores y proveedores ejecutada allá por los 90 en suelo catalán se ha permitido evitar el quebradero de cabeza de tener que gestionarlo todo y ha promovido la expansión de fundaciones, consorcios, institutos u otras formas de gestión privada, supervisadas, todavía, por el CatSalut. A resultas de esto los trabajadores han perdido derechos laborales, se han flexibilizado las plantillas (el que trabaja ya sabe lo que implica esto), se han ido imponiendo los salarios en base a los objetivos (con frecuencia a través de indicadores de carácter económico). Todo ello seguramente ha contribuido al malestar laboral del sector y a conflictos laborales por todo el amplio del territorio (Hospitalet de Llobregat, Manresa, Santa Coloma de Gramanet, Hospital Clínic de Barcelona…). Y lo que nos queda, porque el futuro, si no se remedia colectivamente, tiene visos de profundizar más aún en estas políticas.
Hacia dónde ir Queda claro que los propósitos de los que detentan el poder de decisión y gestión es el de mantener unos servicios públicos básicos, fuertemente debilitados por sus decisiones aprovechando la situación actual de crisis, y derivar otra parte de la asistencia sanitaria, que consideran accesoria, al circuito de pago. Alargar las listas de espera mediante recortes de plantilla, paralizar la construcción de nuevas infraestructuras o cerrar servicios sanitarios que comportan el desplazamiento de pacientes para recibir atención médica, forman parte del camino que ha elegido la nueva gestión del gobierno de CIU. Los sindicatos, a parte de sus bravatas verbales, y la recogida de firmas, realmente no han abogado por nada más que no sea la creación de una mesa donde los médicos sean considerados como parte de la gestión, de la que formarán parte ‘expertos’ de la gestión (y ya sabemos lo que eso significa, lo hemos padecido años y años) de varias asociaciones de médicos, colegios de médicos provinciales y el sindicato de médicos MC. Eso prepara el camino para que los representantes de todo pelaje puedan vendernos la moto de nuevo. Por enésima vez. El que quiera creer en la representación que lo haga, pero que se atenga a las consecuencias después.
La acción tanto de usuarios como de trabajadores debiera centrarse en la no reproducción de las mismas relaciones que nos están siendo impuestas por ordeno y mando. Los culpables tienen nombres y apellidos, ocupan puestos públicos, se relacionan con nosotros, asisten a reuniones públicas. Repeler esta ofensiva implica hacerla realmente visible (no sólo a través de los medios de masas). Implica oponerse frontalmente, y no al modo sindical de la negociación a la baja. Eso ya nos ha llevado a dónde estamos y sólo ha generado desánimo y el descrédito (si aún cabe más) de los sindicatos, órganos colegiados y demás burocracia representadora.
Para contactar: contraretalladessanitat@yahoo.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.