El secretario general de UGT en Catalunya, JM Alvarez, llama mafiosos y radicales a los representantes de CGT autobuses en TMB. Lo de radicales está claro que sí, porque han sabido captar las relaciones laborales en que están inmersos sin exceso de ideologías que lo oculten. Y así han sabido organizarse para responder a los ataques del capital. Lo de mafiosos lo dice este bufón sin gracia porque se siente amenazado cuando sale a manifestarse. Hace bien en protegerse, porque su papel de lubricador para que lxs trabajadorxs asuman las exigencias capitalistas queda últimamente muy al descubuierto. Ganar dinero con los EREs que firman, pactar con la CEOE en bien de la responsabilidad social, pedir migajas a un gobierno arrodillado ante el capital internacional, adormecer a la gente con sus cantos de sirena hipócritas, es lo que están haciendo y si lxs trabajadorxs no lo ven es por ideología o por miedo a que si protestan las cosas sean peores aun. O sea defromación de la realidad o chantaje puro y duro, ambas técnicas en las que UGT está más que entrenada. Por tanto lo de mafiosos se puede aplicar perfectamente al comportamiento de este sindicato, que sabiendo que gracias a sus subvenciones y lo que mueve en las empresas se puede permitir el lujo de extorsionar a todos los demás. Y además sin ruborizarse, cosa que se traduce en que el bigotitos se pueda sentir amenazado. Es normal. Y hace bien en sentirse así. Más después de abrir su bocaza en pleno conflicto. Quizás pretende que sin luchar se va a conseguir algo en este contexto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.