¡Tú!

Tú, que llevas horas viendo la tele y consumes con avidez la basura que se te cuela.
Tú, que todavía corres detrás de diputados y partidos para que te hagan algún favor indebido.
Tú, que desde el sofá maldices a los malos políticos.
Tú, que en el nombre de la Mañana, hoy eliges la destrucción.
Tú, que llevas todo el día corriendo por el pan de cada día, pero no te llega.
Tú, que has conocido la violencia del desempleo.
Tú, que la pobreza te echó a la calle e hiciste de los bancos tu cama.
Tú, que hoy tiene algo que comer, pero mañana vas a pasar hambre.
Tú, que durante todos estos años has optado por callar.
Tú, que aprendiste a lamer en vez de morder a tus patrones.
Tú, que estando congestionado en el rendil de tu pureza ideológica, me ves como enemigo.
¡Tú!
Todos vosotros, me pregunto, ¿qué les diréis a vuestros hijos cuando os pregunten: “¿Y tú, padre, madre, qué hacías cuando nos jodían la vida?”
Todos vosotros, ¿qué esperáis para el futuro, si consentís que vendan hasta el futuro de vuestros hijos?
Todos vosotros, ¿qué esperáis para salvaros?
Vosotros. Yo. Todos. ¡Nosotros!

Desde Verba-volant.